Hola ¿Cómo están? El lunes
pasado estaba hojeando viejos Words en mi computadora, para ver si
encontraba algo digno de publicarse aquí, cuando me topé con el
archivo de la primera novela que empecé a escribir, y que nunca
terminé. Esa novela se titulaba Una
bruja entre tinieblas y el tesoro del rey vampiro,
y hace un par de semanas les compartí una parte (toca aquí para
verla). El titulo largo se debe a que yo imaginaba que podía
escribir una saga, e incluso manejaba ideas para los siguientes
libros, así como posibles títulos:
Una bruja entre tinieblas y
El calabozo del dragón rojo
(nótese como el subtitulo después de “y” recuerda a La
cámara secreta)
Una bruja entre tinieblas y
Las reliquias de la luz
Una bruja entre tinieblas y
El retorno de la sombra
Una bruja entre tinieblas y
La leyenda de Excalibur
Una bruja entre tinieblas y
La batalla por Haifos Herdam
Las ideas para esas posibles
novelas no estaban tan mal, porque se levantaron en una base que no
existió cuando empecé a escribir la que sería la primera novela de
esa saga. Cada una de esas etapas cumplía una función, hablaban
sobre algo, mientras que la novela que sí estaba escribiendo, no.
El problema es que cuando
empecé a escribir no tenía mucha idea de lo que hacía. Me limitaba
a rellenar la libreta de palabras para resolver los problemas
inmediatos a que se enfrentaban los personajes, sin pensar en lo que
iba más allá. Para que tengan una idea, no fue hasta el capitulo
diez que supe cual era el motor de la novela, ese misterio que
llevaría a los personajes a una épica batalla contra las fuerzas
del mal. Quizá no suene tan grave, pero esos primeros diez capítulos
equivalen a cien mil palabras. Casi cuatrocientas páginas en este
formato de letra, y casi el doble de palabras de lo que tendrá La princesa valiente cuando esté acabada. De hecho es el largo de la
primera novela que terminé.
Pero ya me fui del tema.
Cuando encontré el archivo, me puse a leer algunos fragmentos, para
recordar lo que sentía o pensaba en aquel entonces. Los libros son
como máquinas del tiempo y cuando los relees puedes transportarte al
momento en que lo leíste la primera vez. Recuerdas donde lo hiciste
y que pensabas entonces. Ese sentimiento es aún más poderoso cuando
el libro que relees es de tu propia autoría, pero tiene una parte
agria.
Tu prosa de años atrás no es
lo que recordabas. Yo sabía que mi libro era malo, pero al leerlo me
di cuenta de que era peor que eso. Era terrorífico. A continuación
les dejo un párrafo que pertenecía al primer capítulo. Unas líneas
antes, la protagonista vio a su enamorado besándose con otra.
Así, la chica más
desdichada del mundo corría ahora sin descanso ni consuelo. Con un
negro calzado deportivo que le cubría los tobillos, y unas medias
blancas que ascendían por sus pantorrillas, sus pies oscilaban en un
gracioso compás que marcaba el ritmo de la tristeza sin fin. Vestida
con su uniforme del colegio, que estaba formado por una gris falda
que ondeaba desde su cintura hasta un poco más arriba de sus
rodillas y una camisa de color blanco, que en parte se ocultaba bajo
una oscura chaqueta, ella sostenía con su mano derecha los tiros de
su mochila que, apoyada sobre su hombro, se agitaba tras su espalda,
mientras con la mano derecha trataba de limpiarse las lágrimas que
empapaban su rostro. Lágrimas que brotaban de sus ojos color verde
esmeralda, resbalaban por sus mejillas pálidas o entre algunas de
las pecas que resaltaban en sus pómulos y en su pequeña nariz, e
iban a parar junto a su boca, que, de unos carnosos labios, poseía
un rojo natural muy intenso. Su pelirrojo cabello flotaba en el aire
y ondulaba como si fuera una antorcha encendida mientras la imagen de
Peter besando a Susan daba vueltas en su mente, y la hacía sentir
desconcertada. Ni siquiera supo cómo llegó a su casa, y tampoco le
importó en absoluto; lo único que hizo fue lanzarse boca abajo
sobre un sillón de la sala y seguir con su penoso llanto.
Doscientas cuarenta palabras
de aburrimiento… En aquel tiempo, cuando aún escribía la novela,
era de mis escenas favoritas, y tiene su cabida si se la compara con
algunas descripciones de los capítulos que siguen (el capítulo ocho
contiene más de cinco mil palabras que describen a la protagonista
moviéndose por los pasillos de un castillo). Ustedes sacarán sus
conclusiones de por qué es mala, pero me gustaría compartirles las
mías:
- Es una escena poco creíble: ¿Qué chica sale corriendo de esa forma después de ver a su enamorado besándose con otra? Podría entrar si ese chico fuera el novio de la protagonista, pero en este caso no era así. Él era su amor platónico.
- Demasiado perfecta: No me refiero a que esté bien escrita, si no que la chica es demasiado perfecta: ojos verde Esmeralda, labios de Un rojo natural muy intenso… Solo me falto decir que medía un metro ochenta y que tenía las medidas 90-60-90.
- Adjetivos por todas partes: no digo que usar adjetivos esté mal, pero a que ya saben que la protagonista esta triste sin que tenga que decirles que su llanto era Penoso.
- Largo e innecesario: En la historia se sabía que estaba en el colegio ¿para qué describir el uniforme si ya nos lo imaginamos? Si al principio de la historia dije que la protagonista era pelirroja y de ojos verdes ¿para qué volver a describirla? Además, quitando el hecho de que es una descripción muy Mary Sue, es inútil dar tantos detalles sobre el físico de un personaje. A las dos páginas el lector se olvida de la mayoría y se lo imagina como él quiere. (A mi me pasa con algunos libros).
Espero que les gustara la
entrada de hoy. Me pareció interesante mostrarles mis errores al
escribir, porque tal vez podría serles de utilidad. Si encuentran
alguno de estos errores en sus escritos, traten de repararlos si
pueden, pero no se obsesionen y mucho menos abandonen el lápiz por
ello. Cometer errores al escribir es muy fácil, y lo mejor es
dejarlos pasar hasta tener algo terminado. Con un “Fin” plasmado
bajo un texto es más sencillo reparar y más difícil desesperar.
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post, compártanlo. Pueden seguirme en Google+ o agregarme en
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bueno no habia reparado en los errores que tuestas trascribiendo pero se deja llevar no lo miro como un error tal ves fuiste muy objetivo pero para mi esta muy bien tal vez tengas que corregir algo pero esminimo un saludo vas por buen camino un saludo
ResponderEliminarLa verdad es que la escena extraida no está tan mal, pero en el contexto estaba muy mal. Tal vez en un futuro muestre el capitulo entero para que puedan ver los errores. La idea era demostrar un poco de lo que es el proceso de corregir una novela, y demostrar un poco de la actitud que debe tener un escritor. Gracias por comentar. ¡Saludos!
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